lunes, 4 de abril de 2011

Frío

Subir, bajar. Entrar, salir. Vivir, morir. Correr, andar. Dormir, despertar. Calor, frío... Siente como el frío va recorriendo tu cuerpo, de forma que se apodera de tu ser, de ti, y de todo lo que está a tu alrededor. Aún sigo viviendo de una sola alegría, como si se tratase de una llama que tratas de proteger. Llueve, nieva, pero tú mantienes esa llama encendida a base de atención y cuidado. Pasa y pasa el tiempo, y esa llama comienza a ceder ante el dominio del viento. Te cercioras de la vida de esa llama; sigue ahí. Vas observando que cada día es más pequeña. Tu frío se apodera del clima, todo se nubla: todo se vuelve frío. Te acercas y la llama se vuelve más y más pequeña. Ya estás al lado, ya no queda llama. 

¿La has apagado? CGF.

"No descuides nunca lo que más quieres, no lo hagas, aunque no sepas que hacer. Cuando lo hayas perdido descubrirás la fórmula para mantenerlo, pero para entonces será demasiado tarde."